En la búsqueda se han localizado 2 Guías de Práctica Clínica (GPC), un protocolo de actuación y 2 estudios que hacen referencia a qué arterias utilizar en el pie/tobillo para medir de forma correcta el índice tobillo-brazo (ITB). Todos los documentos recomiendan utilizar las dos arterias, la tibial y la pedia, dividiendo el valor mas alto de ambas por el valor de la braquial tomada en cualquiera de los brazos.
Una GPC para adultos con enfermedad arterial periférica (EAP)(1) indica que, el ITB se mide con un dispositivo de ultrasonido Doppler de onda continua portátil y un manguito de presión arterial. La presión arterial sistólica (PAS) más alta medida desde la arteria tibial posterior o arteria pedia (o arteria dorsal del pie) (en cada pierna) se compara con la PAS braquial superior tomada de cualquiera de los brazos. El diagnóstico de EAP mediante el ITB brinda la oportunidad de iniciar un tratamiento para reducir el riesgo cardiovascular y, por lo tanto, disminuir la morbilidad y la mortalidad. Esto es particularmente importante para aquellos individuos que no han sido diagnosticados previamente con una enfermedad aterosclerótica.
Otra GPC para la evaluación del riesgo cardiovascular en adultos asintomáticos,(2) con respecto a la descripción general de la medida del ITB indica que se realiza mediante medición Doppler de la PAS en las 4 extremidades de las arterias braquial, tibial posterior y dorsal del pie. La PAS más alta de la extremidad inferior se divide por la más alta de las PAS de la extremidad superior. Un valor de < 0,9 indicaría la presencia de EAP, que se define como > 50% de estenosis. Cuando se define de esta manera, el ITB tiene una alta sensibilidad y especificidad para la estenosis anatómica. Además de indicar EAP, la guía comenta que un ITB anormalmente bajo también ha demostrado ser un predictor de enfermedad cardiovascular (ECV). Los valores intermedios (0,9 a 1,1) también tienen una asociación gradual con el riesgo de ECV. Un ITB alto (> 1,3) indicaría arterias calcificadas, no comprimibles, también es un marcador de enfermedad arterial.
El protocolo para medir el ITB,(3) indica que para la determinación del ITB, se deben seguir los siguientes pasos cuando se va a medir los índices del tobillo:
- Palpar los pulsos pedios y tibiales posteriores. Para palpar el pedio izquierdo y el tibial posterior derecho es útil la colocación en el lado derecho del paciente, y para la palpación del pedio derecho y el tibial posterior izquierdo, en el lado izquierdo. Realizar la palpación con suavidad para evitar el colapso arterial. Puede ser útil marcar con rotulador el punto donde se detecta el pulso, sobre todo el pedio, por su mayor variabilidad anatómica.
- Colocar el manguito del esfingomanómetro sobre el tobillo (con las gomas en posición proximal) justo por encima de los maléolos y con la cámara por encima del recorrido de la arteria tibial posterior.
- Buscar con la sonda doppler el punto donde se escuche mejor el latido de la arteria pedia derecha. Inflar el manguito. Medir y apuntar la presión arterial sistólica (PAS).
- Repetir el mismo procedimiento con la arteria tibial posterior derecha y apuntar. Si los valores obtenidos no son semejantes en ambos pulsos (< 10 mmHg), es recomendable dejar descansar al paciente y repetir de nuevo la operación.
- Realizar los mismos pasos en la extremidad inferior izquierda.
Un estudio descriptivo transversal, multicéntrico(4) estudia cómo el ITB reclasifica a los pacientes en riesgo bajo o intermedio que han sufrido ECV. El ITB lo realizaron dos enfermeras con entrenamiento y experiencia en la técnica, siguiendo condiciones estandarizadas. Se utilizó un aparato Doppler portátil. Para cada extremidad inferior se calculó el ITB dividiendo la más alta de las PAS (tibial posterior y pedia) por la PAS más alta medida en ambas arterias humerales. Si el ITB era < 0,9, una segunda profesional repetía la técnica y, en caso de que fuera > 0,9, la primera profesional repetía la medición y se consideraba como válido el último valor.
Un estudio prospectivo, longitudinal, observacional y multicéntrico(5) determina la prevalencia de enfermedad aterotrombótica y de EAP en pacientes con historia de eventos isquémicos o con factores de riesgo mayor para desarrollar EAP. Para la medición del ITB, en la extremidad inferior se colocó el brazalete en el tercio inferior de la pierna dejando libre el tobillo, se tomó la presión con la misma técnica que en el brazo (paciente en decúbito supino y en ambiente tranquilo), y se colocó el transductor del Doppler en la arteria tibial anterior y posterior. Los mismos procedimientos se realizaron del lado izquierdo. El ITB resultó de dividir la PAS de cada tobillo (escogiéndose el valor más alto de entre la arteria pedia y la tibial posterior) dividido entre el valor de la PAS más elevada de cualquiera de las arterias braquiales.