El programa de interacciones farmacológicas Stockley y la información sobre interacciones de fármacos de Lexicomp señalan la posibilidad de que el uso conjunto de diazepam y omeprazol de lugar un aumento de los efectos de la benzodiacepina al disminuir el omeprazol su metabolismo. Mientras que en Stockley se considera que es una interacción grave, para el programa de Lexicomp se trata de una interacción de gravedad moderada.
Al analizar el consumo concomitante de benzodiazepina e inhibidores de la bomba de protones, el programa de interacciones farmacológicas Stockley(1) indica que “Se produjeron alteraciones de la marcha (atribuidas a toxicidad por benzodiazepinas) en 2 pacientes a los que se administró triazolam y lorazepam o flurazepam con omeprazol, y otro paciente en tratamiento con diazepam y omeprazol presentó inestabilidad y sedación. El lansoprazol, el pantoprazol o el rabeprazol no parecen presentar interacciones clínicamente relevantes con el diazepam. Las concentraciones séricas de diazepam aumentan con el esomeprazol, pero se desconoce la relevancia clínica de este hecho.”
En concreto respecto a diazepam y omeprazol, informa que:
- En una notificación breve de un caso clínico se describe a un paciente en tratamiento con omeprazol que desarrolló inestabilidad y sedación con dosis pequeñas no especificadas de diazepam, y en otra notificación se comunica el caso de un paciente que alcanzó valores tóxicos de nordiazepam y permaneció inconsciente durante 13 días después de recibir una dosis elevada de clorazepato (1.500 mg a lo largo de 29 h, aproximadamente) y 80 mg/día de omeprazol.
- En un estudio realizado en 8 individuos sanos se observó que 40 mg/día de omeprazol durante 1 semana reducían un 54% el aclaramiento de una dosis única de 100 µg/kg de diazepam por vía intravenosa, mientras que en otro trabajo se detectó que 20 mg de omeprazol reducían un 27% el aclaramiento del diazepam.
- En otro estudio, se determinó que el aclaramiento del diazepam por vía oral descendía un 42% con dosis de 40 mg de omeprazol en norteamericanos de raza blanca, pero sólo un 21% en chinos. También se comprobó la importancia del tipo metabólico en otro estudio sobre esta interacción: sólo los individuos con elevada actividad metabolizadora por la isoenzima CYP2C19 mostraron una disminución significativa del aclaramiento del diazepam cuando se les administró omeprazol.
En cuanto a la importancia y orientación terapéutica de la interacción se concluye que “la información es escasa, pero los datos disponibles indican que los pacientes a los que se administra omeprazol, y posiblemente esomeprazol, con diazepam pueden experimentar un aumento de los efectos de las benzodiazepinas (sedación, marcha inestable, etc.). Cuando esto sucede, debe reducirse la dosis de benzodiazepina. El lansoprazol, el pantoprazol y el rabeprazol no parecen tener interacciones con el diazepam.”
El servicio de alertas de interacciones(2), también de Stockley, cataloga la interacción diazepam/omeprazol como grave y propone como acción monitorizar (hacer un seguimiento del uso concomitante).
Por su parte, el programa interacción de fármacos de Lexicomp(3) al analizar la interacción entre diazepam y omeprazol otorga una calificación de riesgo C que implica la necesidad de realizar un seguimiento del tratamiento: los datos demuestran que los fármacos especificados (en este caso omeprazol y diazepam) pueden interactuar unos con otros de una manera clínicamente significativa; un plan de seguimiento adecuado debe ser implementado para identificar los posibles efectos negativos; y pueden ser necesarios ajustes en la dosis de uno o de ambos fármacos en una minoría de pacientes.
Al hacer referencia a la base farmacológica de la interacción se señala que el omeprazol (inhibidor moderado del citocromo CYP2C19) puede disminuir el metabolismo del diazepam (sustrato del citocromo CYP2C19): el aclaramiento del sustrato disminuiría y sus concentraciones séricas aumentarían; se esperaría en consecuencia un aumento de los efectos de dicho sustrato.
Se considera que la gravedad de la interacción es moderada.
Similar información encontramos en una revisión narrativa de 2014 sobre las interacciones farmacológicas de los inhibidores de la bomba de protones(4).