El cavum vergae (CV), o ventrículo de Verga o también llamado sexto ventrículo, limita con el cuerpo calloso y es una dilatación del espacio que hay posterior al cavum septum pellucidum con el que puede estar comunicado. No es parte del sistema ventricular y no se conecta con él(1).
Aunque hay casos descritos de presencia de CV asociados a malformaciones o a otra patología, se considera una variante de la normalidad que, en ocasiones puede complicarse por presencia de un quiste, o por sangrado.
La búsqueda en bases de datos de estudios identifica casos, o series de casos, que describen la presencia de CV asociado a otras patologías, como malformaciones(2,3,4), psicosis(5) ó dislexia(6).
Sin embargo en estudios descriptivos en los que realiza resonancia magnética a personas asintomáticas la prevalencia del hallazgo de CV va desde el 2%(7) hasta el 20%(8). En una serie de 151 personas sanas a las que se les practica una resonancia magnética de alta resolución, la prevalencia de CV que encontraron fue del 22% en niños, del 39% en adultos jóvenes y del 36% en ancianos (9).
Determinadas complicaciones de un CV, pueden dar lugar a síntomas ocasionados por la torsión ó vólvulo(10), la presencia de un quiste de tamaño importante(11,12) o por sangrado en esa localización(13).