Esta pregunta actualiza a una pregunta ya realizada con anterioridad (2007): “¿Cual es el rango normal de la temperatura timpánica?¿ en cuantos grados ºC difiere de la oral, y de la axilar?”, a la que podrá acceder desde el final de esta página.
En la nueva búsqueda se han encontrado dos revisiones narrativas, una Guía de Práctica Clínica (GPC), un estudio descriptivo y un Ensayo Clínico Aleatorio (ECA). Remarcan la importancia de tener en cuenta la variabilidad de la temperatura según la selección del sitio, los diferentes ritmos biológicos/circadianos, la condición física, la edad, etc.
La revisión narrativa del Harrison online(1) indica que en personas sanas de 18 a 40 años, la temperatura bucal media es de 36,8 ± 0.4°C, con niveles mínimos a las 6:00 horas y máximos a las 16:00 a 18:00 horas. La temperatura bucal máxima normal es de 37,2°C a las 6:00 horas y de 37,7°C a las 16:00 horas; estos valores corresponden al percentil 99 de las personas sanas. La temperatura rectal suele ser 0,4°C mayor que la bucal. Los estudios con adultos demuestran que las lecturas son más bajas con los termómetros timpánicos de modo no ajustado que con los de modo ajustado, con valores de los primeros 0,8°C inferiores a los obtenidos en el recto. Estas mediciones, aunque cómodas, pueden ser más variables que las obtenidas directamente en la boca o el recto. No proporciona información con respecto a la temperatura axilar.
La otra revisión narrativa(2), de diciembre de 2006, valora la variabilidad de la temperatura corporal debido a la selección del sitio, ritmos biológicos, condición física y envejecimiento. Señala la importancia de la calibración de los termómetros e incluye una Revisión Sistemática (RS) exhaustiva. Esta RS es la misma en la que se basa la pregunta ya realizada con anterioridad, en 2007. En dicha RS se indican las medidas de las temperaturas normales, según el sitio de medida:
- En hombres: Oral: 36,7º C (Rango: 35.7-37.7); Rectal: 37,0º C (Rango: 36,7-37,5); Timpánica: 36,5º C (Rango: 35,5-37,5); Axilar: 36,3º C (Rango: 35,5-37,0)
- En mujeres: Oral: 36,2º C (Rango: 33,2-38,1); Rectal: 37,0º C (Rango: 36,8-37,1); Timpánica: 37,0º C (rango: 36,8-37,1); Axilar: 36,3º C (Rango: 35,5-37,0)
Se señala que la temperatura debe ser medida en diferentes sitios, siendo la elección del emplazamiento el resultado de ciertas concesiones a la comodidad y a la fiabilidad. Por ejemplo, la temperatura oral se considera extremadamente conveniente y fiable, mientras que la axilar, timpánica y torácica, son convenientes pero consideradas menos precisas. Al ser una medida interna, la temperatura rectal es muy fiable y por lo general se considera el "patrón oro", aunque el menos conveniente. Las fuentes de variabilidad discutidos en esta revisión confirman que la variabilidad es una característica definitoria de la temperatura corporal en individuos sanos. Para extraer con precisión el significado de cualquier parámetro biológico, es esencial entender y cuantificar cómo influyen la variabilidad de las fuentes endógenas y exógenas. Lograr una mejor comprensión de las fuentes de variabilidad de la temperatura, y el uso de este conocimiento para interpretar los resultados de la temperatura, es crítico cuando las lecturas de las temperatura se utilizan como un componente de toma de decisiones clínicas.
El estudio descriptivo(3) mide la variabilidad circadiana de la temperatura timpánica, oral y axilar en adultos hospitalizados. Las temperaturas fueron tomadas cada dos horas, durante dos días consecutivos, a partir del horario de vigilia hasta las diez de la noche. Los resultados demostraron que, comparando las medidas de los períodos matutino y vespertino, con las del período nocturno, hubo una diferencia significativa por el análisis de varianza, p-value 0,0001. Las medidas timpánicas mostraron temperaturas más elevadas en relación a las medidas oral y axilar, lo que coincide con la literatura internacional. Se demostró que la curva de ritmo circardiano fue similar a las medidas del termómetro oral durante el período de vigilia.
La GPC(4) para la medición de temperatura no invasiva en un servicio de urgencias, con respecto a los adultos, realiza las siguientes recomendaciones sobre cada uno de los sitios de medición(*):
- En adulto normotérmico: realizar la medición de forma oral, tiene un Nivel de Evidencia (NE) A; la timpánica, un NE de I/E (Insuficiente Evidencia para formular la recomendación); la axilar, un NE B y la medición arterial, un NE A.
- En adulto febril: realizar la medición de forma oral, tiene un NE A; y las mediciones timpánica, axilar y arterial, tienen un nivel de evidencia N/R (No se Recomienda, en base a la evidencia actual).
- En adulto con hipotermia: realizar la medición de forma oral, tiene un NE A; y las mediciones timpánica, axilar y arterial, tienen un nivel de evidencia N/E (No hay Evidencia sobre las que hacer una recomendación).
- En adulto crítico/intubado: realizar la medición de forma oral, tiene un NE A; y las mediciones timpánica, axilar y arterial, tienen un NE I/E (Insuficiente Evidencia para formular la recomendación)
El ECA(5) compara los resultados de la temperatura corporal obtenida con termómetros de mercurio estándar en las regiones axilar y oral con los resultados de las obtenidas con termómetros timpánicos infrarrojos en pacientes adultos (a partir de 18 años) con o sin fiebre y determina si las medidas timpánicas son adecuadas para su uso en la población de edad avanzada. Los pacientes fueron expuestos a temperatura ambiental constante durante 10 min antes de las mediciones simultáneas de temperatura, que se realizaron en boca, axila derecha y membrana timpánica. No se observó significación estadística en las lecturas de acuerdo con el tipo de termómetro o lugar con respecto a los grupos de edad (<65 años /> o = 65 años) o con fiebre. La sensibilidad y especificidad de la temperatura timpánica fueron elevadas. Se concluye que los termómetros timpánicos parecen ser óptimos para su uso con la población de edad avanzada. Debido a la facilidad de aplicación, la seguridad y la tolerabilidad en los ancianos, su uso en la práctica habitual parece ser ventajosa. La lectura superior de las mediciones timpánicas puede conducir a una sospecha de infección, especialmente en los ancianos, lo que puede ser útil en el tratamiento clínico en este grupo de edad.
(*) Ver en la GPC los Niveles de Evidencias (NE) y Grados de Recomendación (GR)