Con la búsqueda realizada(Medline, Tripdatabase, Biblioteca Cochrane, Scopus, Google Académico), no hemos identificado estudios que describan las diferentes causas de falsos negativos en resultados de serología en pacientes diagnosticados de fiebre exantemática mediterránea (fiebre botonosa). Sí hemos encontrado estudios que analizan la tasa de falsos negativos en determinadas pruebas serológicas, que en etapas precoces de la enfermedad son muy elevados, pero no identifican otras posibles causas.
La tasa de falsos negativos en estudios serológicos dependerá del tipo de muestra que se analice (sangre, piel u otros tejidos), del tipo de prueba realizada y sobre todo del momento de la evolución del cuadro clínico en que se tome la muestra.
En el sumario de Uptodate de enfermedades por otras ricketsias(1) se revisan las diferentes pruebas diagnósticas serológicas que se han utilizado para el diagnóstico de enfermedades provocadas por las diferentes especies de ricketsias (reacción de aglutinación de Weil Felix, anticuerpos por microinmunofluorescencia, prueba de ELISA e inmunoensayo de Western blot). El Weil Felix indica que ni es sensible ni específico y debería ser abandonado su empleo en el diagnóstico de ricketsiosis.
Una guía de práctica clínica de los CDC(2)sobre enfermedades provocadas por ricketsias, concluye sobre aspectos de interés para esta pregunta que:
- En los casos que el paciente presenta un exantema cutáneo, la reacción de la PCR o pruebas de inmunohistoquímica pueden ser realizadas de una biopsia de piel de la zona del rash y ofrecer un resultado rápido. Estas pruebas tienen una buena sensibilidad (del 70%) si se aplican a muestras de tejidos analizados durante la fase aguda de la enfermedad y antes de que se haya aplicado el tratamiento antibiótico; pero un resultado negativo no debe ser utilizado para guiar las decisiones de tratamiento.
- La sensibilidad de las pruebas de inmunofluoerescencia (IFA) en una muestra de sangre depende directamente del momento en que se realice la toma de muestra. Si la muestra se realiza de forma muy precoz, en los primeros días de comienzo de los síntomas, la mayoría de las muestras tomadas son negativas (falsos negativos por lo tanto). Cuando pasan 7 o 10 días del inicio de los síntomas la sensibilidad se va incrementando. Tras 14 días del inicio, la sensibilidad de la IFA aumenta y pasa a ser del 94-100% y esta aumenta si se toma un par de muestras (al inicio y a las dos semanas, y se comparan los resultados).
- La toma de muestras y cuantificación de IgG y de IgM, al inicio de la infección y a las dos semanas de evolución es fundamental para confirmar el diagnóstico, considerando que una elevación de los títulos de cuatro veces el inicial confirma el diagnóstico casi con total seguridad.