La búsqueda, centrada en estudios realizados con pacientes con un primer episodio de luxación de hombro o con luxaciones recidivantes en los que se comparan los hallazgos de alguna de las técnicas diagnósticas mencionadas con los resultados de la artroscopia, ha identificado los siguientes trabajos:
En un estudio de cohortes(1) publicado en 2010 se compara la prevalencia de lesiones acompañantes en pacientes con un primer episodio de luxación hombro (n = 33) y en pacientes con luxación recidivante (n = 111). En todos los pacientes se realizó una artrografía por resonancia magnética (RM) y una artroscopia diagnóstica y se encontró que en 139 de los 144 pacientes evaluados, los resultados de la artroscopia, respecto a las lesiones asociadas a la luxación, coincidieron con los resultados de la artro-RM (96,5%).
En una serie de casos(2) de 44 pacientes se investigó el papel de la ecografía en la evaluación preoperatoria de pacientes con inestabilidad anterior del hombro recurrente post-traumática. A todos los pacientes se les realizó una ecografía y posteriormente un diagnóstico artroscópico y una estabilización del hombro, bien abierta o artroscópica. La ecografía reveló un rodete anterior inestable (equivalente a una lesión de Bankart) en 36 hombros y esta lesión se verificó en los 36 hombros durante la artroscopia. En tres hombros, la artroscopia reveló una lesión en el rodete glenoideo, que no mostró la ecografía. En cinco hombros en los que la artroscopia no encontró una lesión de Bankart, la ecografía tampoco había mostrado previamente ninguna lesión. Se encontró una lesión de Bankart ósea en cuatro hombros, tanto con la artroscopia como con la ecografía. En base a estos hallagos los autores concluían que la ecografía mostraba una alta correlación con los hallazgos artroscópicos: la sensibilidad fue del 92% y la especificidad del 100%; el valor predictivo positivo fue del 100%, y el valor predictivo negativo del 63%.
En una serie de casos de 16 pacientes(3) con una primera luxación del hombro se comparó la efectividad de la RM en identificar patología comparando sus hallazgos con los encontrados durante la cirugía astroscópica. El análisis de los resultados mostró una correlación moderada para las lesiones del rodete superior (kappa = 0,60) y un grado de acuerdo aceptable para la rotura del manguito rotador (kappa = 0,355). Cuando se evaluó la cápsula articular, sólo se encontró una correlación aceptable para la presencia de una anomalía (kappa = 0,310) y para la de redundancia y el desgaste (kappa = 0,394). Ambos métodos fueron sensibles para la detección de lesiones de Hill-Sachs (kappa = 1,0), siendo concordancia moderada (kappa = 0,44) en la estimación del tamaño de la lesión. Hubo un grado de acuerdo perfecto para la detección de lesiones de Bankart o para la lesión del rodete equivalente (kappa = 1,0). Ante estos hallazgos, la conclusión que se establece es que la RM puede ser considerado una valiosa herramienta para la detección de lesiones de Hill-Sachs y lesiones de Bankart asociadas a luxación anterior traumática del hombro. Su capacidad para detectar otras lesiones patológicas, sin embargo, es limitada.
En otro estudio prospectivo(4) se realizó un estudio de imagen con RM, y posteriormente una artroscopia, a 25 pacientes que habían sufrido una primera luxación anterior de hombro de causa traumática. La evaluación por RM identificó 15 desgarros del rodete glenoideo, 12 lesiones de Hill-Sachs, una lesión total del manguito de los rotadores, una rotura parcial del manguito de los rotadores, y una rotura parcial de tendón del bíceps. El examen artroscópico encontró 22 desgarros del rodete, 15 lesiones de Hill-Sachs, una lesión total del manguito de los rotadores, una rotura parcial del manguito rotador, una rotura parcial del tendón del bíceps y una lesión de Bankart ósea. En este caso se concluía que RM convencional era sólo moderadamente fiable en la evaluación preoperatoria de los desgarros del rodete y de las lesiones de Hill-Sachs.
También en el estudio prospectivo de Denti et al(5) se determinó la eficacia diagnóstica de la RM versus la artroscopia, en este caso para evaluar las lesiones condrales u osteocondrales de la cabeza humeral, en 15 pacientes con inestabilidad anterior del hombro. La RM obtuvo 6 verdaderos positivos, 5 verdaderos negativos y 4 falsos negativos, y su precisión y sensibilidad fueron del 60% y 87%, respectivamente. La evaluación artroscópica dió lugar a 8 verdaderos positivos, 5 verdaderos negativos y 2 falsos negativos, con una sensibilidad del 80% y una precisión del 87%.