No se han localizado ensayos clínicos que comparen la efectividad del tratamiento con isotretinoína tópica/sistémica versus la extirpación quirúrgica en el manejo de la leucoplasia oral (LO).
La información localizada aunque muestra que estas opciones de tratamiento pueden tener un efecto beneficioso en la resolución de las lesiones, no permite establecer recomendaciones claras respecto a su efectividad en la prevención de la transformación maligna posterior de las lesiones resueltas:
Una revisión sistemática (RS) de la Cochrane realizada en 2006(1) que incluyó 9 estudios, ninguno de los cuales comparaba el tratamiento tópico o sistémico con el retinoide isotretinoína frente al tratamiento quirúrgico, comenta que al realizar la revisión se halló sólo un ensayo controlado aleatorio (ECA) que evalúaba las intervencionesquirúrgicas(2) en el manejo de esta patología, pero que fue excluido de la revisión al no incluir ningún grupo de tratamiento/placebo con el que comparar (en el estudio se comparaban dos técnicas láser). Respecto a isotretinoína aplicada de forma tópica, la revisión incluye un único ECA(3) en el que se compara este tratamiento con placebo. También forma parte de la revisión un sólo ECA(4) en el que se contrasta isotretinoína sistémica con placebo. Ambos estudios encontraron un beneficio pequeño pero significativo aunque también mostraron altas tasas de recidiva: Hong et al informaron que nueve de los 16 pacientes (56%) que respondieron al tratamiento (parcial o completamente) recidivaron (no hubo información disponible con respecto a los dos del grupo placebo que tuvieron una respuesta parcial)(4). En el estudio de Piattelli(3) uno de cada cinco pacientes (20%) que respondió al tratamiento experimental y uno de cada cuatro pacientes (25%) que respondió al placebo, recidivaron. Como conclusión los autores de la revisión indicaban que "Algunos tratamientos fueron efectivos para la curación de la leucoplasia bucal; sin embargo, no parecían ser capaces de prevenir las recidivas y la malignización de la lesión. Por este motivo, la curación clínica de la leucoplasia después de uno de estos tratamientos, no libera al clínico de la responsabilidad de hacer un seguimiento regular." Respecto al papel de la cirugía en el manejo de esta patología comentan que "Aunque la cirugía sigue siendo la primera opción para la mayoría de los clínicos, no puede evaluarse la efectividad real de dicho tratamiento porque no fue posible encontrar algún ECA de cirugía versus ningún tratamiento (espera y observación) en la prevención de la transformación maligna de la leucoplasia". "Se necesitan estudios para comprobar la eficacia de la cirugía en el tratamiento de la leucoplasia."
Otra RS publicada en 2007(5) también concluye que debido a la ausencia de ECAs no es posible ofrecer recomendaciones basadas en la evidencia respecto a intervenciones quirúrgicas específicas para el tratamiento de las lesiones orales displásicas. Los resultados obtenidos de otro tipo de estudios ofrecen resultados contradictorios respecto a la prevención de la transformación maligna de la displasia oral tras tratamiento con las diversas modalidades quirúrgicas disponibles (bisturí, láser, crioterapia). Entre las opciones de tratamiento no quirúrgico no realiza mención al tratamiento con isotretinoína tópica y, en cuanto a la isotretinoína sistémica, considera que tampoco se pueden establecer recomendaciones terapeúticas basadas en la evidencia.
Un documento de consenso publicado en 2008(6) comenta las lagunas que existen para determinar el método más efectivo de tratar la LO y establece:
- En relación a la excisión quirúrgica de las lesiones, que el riesgo de transformación maligna posterior puede no disminuir con la extirpación de la lesión inicial. Sin embargo, la excisión quirúrgica puede permitir asegurar que todas las áreas de displasia han sido identificadas (mediante examen histopatológico) y extirpadas.
- Respecto al tratamiento médico de la LO, que, aunque algún tratamiento, incluidos isotretinoína tópica y sistémica, ha mostrado un posible efecto beneficioso en la resolución de la LO, ninguno de ellos se ha mostrado efectivo en la prevención de la transformación maligna de la LO.
- Como conclusión, que hasta que no se disponga de estudios apropiados y con seguimiento a largo plazo, sobre la efectividad de las distintas opciones terapéuticas, debería asumirse que la más mínima leucoplasia debería ser extirpada al completo, los pacientes controlados regularmente, para valorar posibles cambios en la mucosa, y se deberían evitar factores de riesgo mayores de displasia epitelial oral, en particular el uso del tabaco y el consumo de alcohol.