Hemos encontrado una Revisión Sistemática (1) que evalúa la eficacia de las intervenciones psicosociales para el abuso o la dependencia del cannabis, donde se incluye un ensayo clínico aleatorizado (ECA) (2) que estudia la eficacia de la terapia multidimensional familiar (Multidimensional Family Therapy -MDFT), de la intervención educacional multifamiliar (Multifamily Educational Intervention-MEI) y la terapia de grupo de adolescentes (Adolescent Group Therapy - AGT), con familias de 182 adolescentes con abuso de cannabis y alcohol. Los resultados indican la mejora de los adolescentes con los tres tratamientos, produciéndose una reducción en el consumo de ambas drogas. El MDFT (3) basa sus intervenciones en el bienestar de los padres (funcionamiento psicológico, afrontamiento al estrés, ayuda social, opinión sobre su rol y capacidad como padre) y su comportamiento en cuanto a la educación de los hijos y su cuidado. También interviene en los acontecimientos diarios en la familia, particularmente en las relaciones familiares y en su mejora. El consumo por parte de los padres, de alcohol y otras drogas, también es un foco del programa. Esta terapia interviene multi sistémicamente con: el adolescente y padres individualmente, con la familia como sistema de interacción e interacción de la familia con los sistemas sociales (escuela, apoyos en la comunidad) que impactan en el desarrollo del adolescente. Individualmente con los padres, el terapeuta tratará habilidades tales como educación de los hijos, habilidades de comunicación, manejo de la ira, el desarrollo adolescente, educación sobre enfermedades de trasmisión sexual y entrenamiento de responsabilidades.
En otro ECA (4) sobre la eficacia de un tipo de terapia familiar en la modificación de problemas del comportamiento y del uso de sustancias por parte de adolescentes hispanos, tiene como uno de sus objetivos proporcionar la validación de un modelo específico de terapia familiar estratégica breve (Brief Strategic Family Therapy -BSFT), basado en los principios estructurales y estratégicos de la terapia de familia fomentados por Haley (1987). Una de las premisas de la BSFT es que la sintomatología adolescente está arraigada en las interacciones de las familias mal adaptadas, con límites inadecuados, alianzas familiares, excesivamente rígidas o permeables, y la creencia que un solo individuo (generalmente el adolescente) es responsable de los problemas de la familia. Por lo tanto, la BSFT funciona asumiendo que la familia debe transformar las maneras en que las funciona, lo que producirá reducciones en el actual problema del adolescente. Señala el autor que los problemas de la familia se diagnostican en las áreas de la distribución del poder, de los límites, de la conveniencia de desarrollo, del paciente identificado y de la resolución de problemas.
Finalmente, otro ECA (5) evalúa la eficacia de dos modelos de terapia, una de ellas orientada a la familia (Strengths Oriented Family Therapy-SOFT). Un estudio (6) describe este modelo, desarrollado por trabajadores sociales y las técnicas de intervención. Señala que previamente incluye una sesión de otro modelo de terapia de familia, el Strengths-Oriented Referral for Teens (SORT) (Smith & Hall, 2007), que utiliza los principios de la entrevista motivacional, se discute en esta sesión las múltiples opciones de tratamiento, acentuando la opción de cuál es el más apropiado para la familia. Después de esta sesión, los adolescentes y los padres comienzan el SOFT, que consta de tres etapas, donde se trabaja sobre todo en resolución de problemas. También acuden a sesiones multifamiliares de grupo para mejorar las habilidades de comunicación.