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Vacunación Frente al virus del papiloma humano en personas sanas no vacunadas - FAQ para ciudadanos
El VPH es un virus que infecta solamente a los seres humanos. La infección por este virus es muy frecuente, de hecho, la mayoría de las personas no vacunadas se infectan en algún momento de su vida, generalmente a través de las relaciones sexuales. La característica más importante de este virus es su relación con el cáncer de cuello de útero, pene, vulva, vagina, cuello y garganta. Puede afectar, por lo tanto, a hombres y mujeres. Actualmente existe una vacuna que ofrece una elevada protección frente a este virus.
El VPH se transmite principalmente por contacto sexual.
La mayoría de las personas no vacunadas se infectan poco después del inicio de las relaciones sexuales. No es necesaria la penetración para que tenga lugar el contagio. El contacto genital piel con piel, incluido el sexo oral, es un modo de contagio claramente demostrado, por lo que los preservativos no ofrecen una protección total, aunque sí elevada frente al contagio por el VPH y todavía mayor frente al VIH y otras enfermedades de transmisión sexual, como la sífilis, la gonorrea y la infección por clamidia.
El virus suele transmitirse habitualmente de forma ¿silenciosa¿, ya que las personas que lo transmiten habitualmente no tienen ningún síntoma ni lesión.
Sí, el VPH tiene una alta capacidad de infectar a las personas. Las personas portadoras del VPH habitualmente no tienen ningún síntoma ni lesión, pero pueden transmitir el virus.
Se han descrito muchos tipos diferentes de virus del papiloma humano (VPH), que se nombran con números. Suelen dividirse en dos grupos, según su capacidad de producir cáncer. Estos grupos son:
- Los de alto riesgo, que tienen mayor probabilidad de causar cáncer. La inmensa mayoría de están causados por los tipos 16 y el 18, aunque también hay otros tipos de alto riesgo, como el 31, 33, 45, 52 y 58, incluidos en la vacuna que se administra.
- Los de bajo riesgo, generalmente asociados con verrugas genitales u otras lesiones no malignas en la piel, como los condilomas. La gran mayoría están causadas por los tipos 6 y 11.
Todas las vacunas aprobadas contra el papiloma, actualmente y en el pasado (Cervarix®, Gardasil® o Gardasil 9®) cubren los tipos 16 y el 18, ofreciendo por tanto elevada protección frente al cáncer. La vacuna actualmente administrada en campaña, Gardasil 9® ofrece protección frente a los tipos 16, 18, 6, 11 y otros 5 menos comunes.
La mayoría de las personas infectadas por el virus del papiloma humano no tienen ningún síntoma ni lesiones visibles relacionadas con el virus.
Muchas personas infectadas eliminan el virus de forma natural. Sin embargo, algunas personas no eliminan el virus, lo que se conoce como infección persistente. En estas personas éste puede ser causa de lesiones precancerosas que tampoco tienen ninguna clínica.
En cambio, en algunas personas el virus puede favorecer el desarrollo de cánceres como el de cuello de útero, pene, vulva, vagina, cuello y garganta. El VPH es responsable de 19 de cada 20 casos de cáncer de cuello de útero, pero también de un porcentaje reseñable de cánceres en zona genital o cuello y garganta en varones. En mujeres, algunas de estas lesiones se diagnostican frecuentemente a través del cribado de cáncer de cuello de útero, pero los cánceres relacionados con VPH en varones no tienen pruebas de cribado para su detección precoz.
Además, el VPH también es causa de lesiones no malignas, como las verrugas genitales, pero que pueden ser muy molestas; de hecho, el VPH es el responsable de 9 de cada 10 casos de verrugas genitales.
Además del cáncer de cuello de útero, del que la población general más conoce su relación con el VPH, y otros que ocurren en las mujeres, los hombres también padecen cánceres relacionados con este virus, como son el de ano, pene, boca, cuello y garganta, entre otros, quizás menos conocidos.
Entre los factores de riesgo de contraer la infección por el virus del papiloma humano (VPH) se encuentran:
- Iniciar a corta edad las relaciones sexuales.
- El número de parejas sexuales.
- No usar preservativo.
El tabaco y la situación de inmunodepresión (defensas bajas) reducen la probabilidad de eliminar el virus, favoreciendo que la infección se haga persistente.
Por último, es necesario recordar que el tabaco es un factor de riesgo para el cáncer de cuello de útero y de garganta, ambos también relacionados con el virus del papiloma humano. Para el cáncer todo suma: cuantos más factores de riesgo se den en la misma persona, más probable es que esta enfermedad aparezca.
La vacunación es efectiva para prevenir la infección causada por el VPH, tanto en varones como en mujeres. Al prevenir la infección, tiene potencial para reducir las complicaciones asociadas, como diversos tipos de cánceres íntimamente relacionados con el virus, como el de cuello, garganta o región genital, así como las lesiones precancerosas en estas localizaciones. Además, hay que tener en cuenta que, a diferencia del cáncer de cuello de útero en mujeres, muchos de estos cánceres no tienen pruebas de cribado para una detección precoz.
A todo esto se suma que el virus se ha asociado con lesiones no cancerosas, como las verrugas genitales, que son molestas y de difícil tratamiento.
Los preservativos son útiles para reducir el riesgo de infección, aunque no lo eliminan por completo, ya que el virus puede encontrarse en zonas del área genital y anal no cubiertas por el preservativo, siento el contacto piel con piel y el sexo oral formas de contagio demostradas. Por tanto, la vacunación es una forma más eficaz de reducir el riesgo de infección y sus consecuencias negativas.
Cabe descartar que, además, los preservativos son muy eficaces para la prevención de otras infecciones de transmisión sexual (VIH, sífilis, gonorrea, clamidias) y evitar embarazos no deseados.
Actualmente existen dos vacunas autorizadas. Ninguna de ellas contiene virus con capacidad de multiplicarse. Todas ellas protegen frente a los tipos 16 y 18, que son los responsables de la gran mayoría de cánceres asociados al virus.
Las vacunas disponibles en España y el resto de Europa son: Cervarix®, que cubre los tipos 16 y 18, y Gardasil 9®, que cubre los tipos 16, 18 y otros 5 menos comunes (31, 33, 45, 52 y 58), todos ellos relacionados con distintos cánceres, así como los tipos 6 y 11, relacionados con las verrugas genitales.
La vacuna actualmente administrada en campaña es Gardasil 9®.
Sí. Desde su autorización en 2006 se han administrado cientos de millones de dosis en el mundo, mostrando un buen perfil de seguridad.
Las reacciones adversas más comunes son leves, como dolor o inflamación en el lugar de la inyección, fiebre, dolor de cabeza, mareos o malestar general. Estos síntomas suelen desaparecer en 24 a 48 horas después de la vacunación. En caso de fiebre o malestar puede tomar paracetamol u otro analgésico/antitérmico, si fuese necesario. Si, tras la vacunación, usted considerase que la vacuna le ha podido ocasionar un efecto adverso importante, debe comunicarlo a su profesional sanitario de referencia.
Puede ampliar la información en el prospecto de Gardasil 9®.
Deben vacunarse frente al virus del papiloma humano (VPH):
- Mujeres de hasta 25 años (incluidas) que no habían sido vacunadas en su momento en la escuela, al igual que a los varones nacidos a partir del 1 de enero de 2011. Ampliar información.
- Chicos y chicas de 11-12 años, quienes la reciben en sus centros escolares (puede ampliar información.
- Varones no vacunados nacidos entre 1999 y 2010. Se puede ampliar información sobre la campaña específica, que se realizará hasta 2027.
- Personas con determinadas condiciones de riesgo:
a. Hombres que tienen relaciones sexuales con hombres (HSH).
b. Situación de prostitución.
c. Síndrome WHIM, que es un tipo de inmunodeficiencia primaria.
d. Infección por VIH.
e. Trasplante de órgano sólido o de progenitores hematopoyéticos.
f. Mujeres que hayan recibido cualquier tratamiento por lesión intraepitelial de alto grado de cuello de útero (CIN2+). En este caso se vacunará a todas las mujeres, independientemente de la edad.
Las edades límite en las que está recomendada la vacunación en cada uno de los grupos y el resto de cuestiones sobre la vacunación frente a VPH de estas personas se puede ampliar en la web Vacunación frente al virus del papiloma humano (VPH) en grupos de riesgo.
La vacunación de las personas incluidas en cada uno de estos grupos es totalmente gratuita.
Sí, deben vacunarse, aunque ya hayan iniciado relaciones sexuales.
Las personas no vacunadas pueden infectarse o no en sus primeras relaciones sexuales. Si se llegan a infectar, podría ser con uno o más tipos del virus del papiloma humano (VPH), pero probablemente no con todos los 9 tipos que cubre la vacuna actualmente administrada en España, por lo que ésta proporcionaría una protección que no se conseguiría sin ella.
Sí, deben vacunarse, aunque ya haya han tenido una infección previa por el virus, ya que hay diferentes tipos de virus. La vacuna no protegería frente al tipo o tipos de virus por el que la persona ya haya sido infectada, pero sí frente al resto.
En personas sin problemas de defensas de hasta 25 años (incluidos), cuando les corresponda la vacunación por su año de nacimiento, únicamente es necesaria una dosis, tal y como recomienda la Organización Mundial de la Salud y otros organismos internacionales.
Para personas con problemas de defensas, tanto congénitas como secundarias a tratamiento, independientemente de su edad, se administrarán 3 dosis en pauta 0, 2 y 6 meses.
Para personas con alguna condición de riesgo por la que tengan recomendada la vacunación frente a VPH, debe consultarse la web Vacunación frente al virus del papiloma humano (VPH) en grupos de riesgo para conocer las dosis que debe recibir.
En los últimos años, varios estudios científicos han mostrado que una única dosis de la vacuna ofrece protección frente al virus del papiloma humano (VPH) similar a las pautas con varias dosis en personas sin problemas de defensas. Esta recomendación fue avalada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en 2022 debido al mejor conocimiento de la efectividad de la vacuna y fue adoptada en países como Reino Unido, Irlanda o Australia, entre otros. En España recientemente se ha revisado la evidencia científica por parte del Ministerio de Sanidad y las Comunidades Autónomas y se ha recomendado cambiar a una única dosis.
Por tanto, aunque las personas de su año de nacimiento vacunadas anteriormente recibiesen más de una dosis, si aún no se ha vacunado y tiene hasta 25 años de edad, inclusive, ya solo tiene que recibir una dosis si no tiene ningún problema de defensas.
La vacuna frente al VPH no debe administrarse a quienes hayan tenido una reacción alérgica grave (como anafilaxia) a alguno de sus componentes, o tras recibir una dosis previa de esta vacuna.
Si presenta fiebre o una enfermedad aguda moderada o grave, se recomienda retrasar la vacunación hasta que los síntomas hayan desaparecido.
Sí. La vacuna frente a VPH es una vacuna que se puede administrar en personas con problemas de defensas sin riesgo. Sin embargo, siempre debe recibir 3 dosis de vacuna (0, 2 y 6 meses).
Para mayor información debe consultar en la web Vacunación frente al virus del papiloma humano (VPH) en grupos de riesgo
Sí. Si están indicadas, se pueden administrar a la vez, tanto las vacunas de calendario, como las vacunas que se reciban por alguna condición de riesgo o las estacionales (gripe y COVID-19) en caso de estar indicadas.
Cuando se administra de una vacuna el mismo día, se suele hacer en dos miembros diferentes o, si se administran más de 2, dejando una distancia mínima de 2,5 cm entre ellas.
En caso de no administrar las vacunas el mismo día, no hay que dejar ningún intervalo de días específico entre la administración de la vacuna frente al VPH y cualquier otra.
Sí, se pueden administrar perfectamente ambas vacunas el mismo día sin problemas. Si no se hace el mismo día, no hay que mantener ningún intervalo especial entre una y otra.
No, la vacuna frente al VPH no produce problemas de fertilidad.
No, no es necesario realizar ninguna prueba para recibir la vacuna. Existen pruebas de detección de virus del papiloma humano (VPH), pero no son necesarias para poder recibir la vacuna.
No. Como con el resto de las vacunaciones en España, la vacunación frente a VPH no es obligatoria, aunque sí muy recomendable para las personas en las que está indicada.
En aquellas personas de la población a vacunar que no la hayan recibido con anterioridad, se realizará la vacunación por parte del enfermero en los distintos centros de salud y consultorios para las personas cuya asistencia sanitaria es por parte del Servicio Murciano de Salud. Podrá pedir cita previa con su enfermera a través de la web de cita previa, la app de cita previa, telefónica o en el mostrador de su centro de salud.
Las personas mutualistas o con seguro privado, solicitarán cita previa en su puesto de vacunación habitual.
Además, las personas pertenecientes al municipio de Murcia, independientemente de su asistencia sanitaria, podrán solicitar cita previa en la web del Ayuntamiento de Murcia.
- Use ropa cómoda y amplia, que sea fácil para dejar la zona del brazo libre.
- No apriete ni contraiga el brazo, estando relajado se nota menos la inyección.
- El día de la vacunación debe desayunar adecuadamente para evitar la sensación de mareo.
- Después de vacunarse, se le pedirá que espere unos 30 minutos, al igual que con el resto de vacunas, para asegurarse de que se encuentra bien y que puede seguir su rutina.
- A veces puede doler un poco el brazo donde le han pinchado o que se ponga un poco enrojecido. Esto es normal y desaparece espontáneamente en 2 o 3 días.
Recuerde que cuando terminen de ponerle las vacunas, el/la enfermero/a le adjuntará en su carnet de vacunaciones la pegatina del lote de la vacuna recibida.
Última actualización: 18/02/2025
